Revolución o Guerra n°14

(Semestrial - Febrero 2020)

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Respuesta a un compañero simpatizante sobre las condiciones de adhesión al GIIC y a un grupo comunista

Muchos camaradas de diferentes países nos han preguntado recientemente sobre las condiciones y el proceso de adhesión a nuestro grupo. Pensamos útil publicar una de nuestras respuestas a la que cualquier lector o simpatizante pueda referirse. Más allá de las condiciones específicas de adhesión vinculadas a los principios y la plataforma política del GIIC, nos parece que el método que presentamos aquí debería aplicarse a cualquier grupo comunista de hoy en día. También serán bienvenidos los comentarios o críticas, ya sea que provengan de militantes individuales o de grupos o círculos políticos ya constituidos.

El GIIC al compañero L,

Estimado compañero,

¿Cuáles son las condiciones y modalidades para adherir a nuestro grupo? La adhesión a cualquier grupo comunista, a fortiori al partido comunista de mañana, de nuevos miembros es un paso individual que se realiza sobre la base de una conciencia política, o convicción, y una voluntad militante: « Un partido vive cuando viven una doctrina y un método de acción. Un partido es una escuela de pensamiento político y, por consiguiente, una organización de lucha. El primero es un hecho de conciencia, el segundo es un hecho de voluntad, más precisamente, de tendencia a una finalidad » (Partido y Clase, PC de Italia, 1921 [1]). La conciencia política se refiere en primer lugar al programa comunista y, más inmediatamente, a la plataforma política del grupo o partido. La voluntad se refiere al compromiso militante dentro de un cuerpo colectivo organizado centralmente, el partido.

La plataforma política

Desde un punto de vista formal, el acuerdo – igualmente formal – con nuestras posiciones básicas (http://igcl.org/+Nuestras-posiciones+) es la condición y el criterio principal para cualquier adhesión a nuestro grupo (como a cualquier grupo comunista). Pero, como verás, el conjunto de estas posiciones no constituye realmente una plataforma política en la que cada posición, que llamamos posición de clase, se argumenta y presenta en un marco global. Esto se debe a varias razones, una de las principales es que, hasta ahora y sin prejuzgar las circunstancias futuras, no consideramos que el GIIC pueda, ni deba, aspirar a constituir el polo, o incluso uno de los polos, de reagrupamiento internacional. Aunque no excluimos la re-agrupación e integración de nuevos camaradas en nuestra lucha, por supuesto, inscribimos todas nuestras actividades, además de la intervención en las luchas obreras, en torno a la lucha por el partido y la reagrupamiento internacional; es decir, concretamente, en torno a la Tendencia Comunista Internacionalista, que consideramos la principal organización de las fuerzas y corrientes históricas de la Izquierda Comunista y la única en condiciones de ser y actuar como polo histórico e internacional de reagrupamiento, o de referencia, hoy en día.

No obstante, nuestras posiciones de principio, base de toda adhesión a nuestro grupo, se inscriben en el marco de las plataformas políticas de la Tendencia Comunista Internacionalista (TCI) y de la Corriente Comunista Internacional (CCI) "original", es decir, la que no integra la cuestión de la teoría idealista y oportunista de la descomposición que esta organización adoptó en los años 90. Esto no se debe simplemente a la casualidad – los orígenes y trayectorias políticas de nuestros miembros han sido influenciados más bien por una u otra de las dos corrientes, según sea el caso – ni a nuestras limitaciones como grupo. Creemos que las principales divergencias ’históricas’ entre las dos corrientes históricas se superponen con la mayoría – no todas – de las cuestiones esenciales a las que se enfrentan hoy en día el proletariado y sus minorías políticas y a las que tendrán que responder en el futuro. Estos debates deben ser asumidos, organizados y sistematizados por estas fuerzas e incluso pueden tener lugar dentro del mismo marco organizativo, al menos en este espacio común que constituye el campo proletario, o el partido en devenir. Este es el significado y uno de los ejes principales de nuestra orientación política desde nuestra constitución.

En cuanto a la definición individual, o posicionamiento, sobre nuestras principales posiciones, puedes referirte al planteamiento y toma de posición que uno de nuestros simpatizantes, ahora miembro de nuestro grupo, había adoptado en 2014: Toma de posición sobre las plataformas de la TCI y de la CCI (Revolución o Guerra #2 [2]). Este es para nosotros un ejemplo del método que debe utilizarse para cualquier proceso de reagrupación y adhesión a un grupo comunista y asegurar su máximo éxito a largo plazo.

Las orientaciones políticas

Si el acuerdo "verificado", es decir, discutido entre el camarada que quiere adherir y el grupo en su conjunto, con todos los puntos de la plataforma, en nuestro caso nuestras posiciones o principios básicos, es un requisito previo para cualquier adhesión, también debe basarse en un acuerdo general con las principales orientaciones políticas del grupo o partido, es decir, con la "táctica", de modo que haya un mínimo de homogeneidad y unidad política para que el organismo pueda actuar con la mayor eficacia posible – principios y tácticas estando estrechamente vinculados entre sí y teniendo que ser en coherencia. Es en este sentido que la conferencia de constitución del GIIC en 2013 había adoptado las Tesis sobre la Situación Internacional [3] (RG #1) y un texto, Retorno crítico a una contribución a un balance de la Izquierda Comunista, que « fue adoptado como texto de orientación por la conferencia de constitución de noviembre de 2013 » (RG #2) [4] que definía nuestra orientación hacia el campo proletario.

Por supuesto, y a diferencia de la plataforma y las cuestiones de principio, no se trata de estar de acuerdo palabra por palabra, punto por punto, con los textos que tratan de cuestiones tácticas. Nuestras tesis sobre la situación internacional datan de julio de 2013 y desde entonces la situación histórica internacional ha evolucionado, confirmando algunos de nuestros puntos, invalidando otros y planteando otros que las Tesis no abordaban. Sin embargo, el marco fundamental, teórico y político, de este documento está definido por la alternativa histórica de la revolución proletaria o guerra imperialista generalizada como la expresión última de todas las contradicciones del capitalismo y, por lo tanto, el factor principal de la evolución de su situación ; y en particular de la evolución de la relación de fuerzas internacional entre capital y trabajo, entre la clase capitalista y el proletariado. Por lo tanto, esta cuestión es también un punto esencial para la integración a nuestro grupo hoy en día porque determina toda nuestra actividad e intervención en la clase y el campo proletario para las que es necesario un mínimo de homogeneidad y unidad política para su desarrollo y eficacia.

Lo mismo se aplica a la orientación política a desarrollar en la lucha por el partido. La concepción del campo proletario en su conjunto, es decir, con sus fuerzas y debilidades, su unidad y sus contradicciones – en particular su división entre fuerzas partidistas y antipartidistas  [5] –, el peligro permanente de la penetración del oportunismo político en su seno y, por tanto, de la lucha que hay que librar contra él, y el hecho de que el partido de mañana sólo podrá constituirse sobre la base del patrimonio programático de la Izquierda Comunista [6], es un punto que debe debatirse y aclararse antes de cualquier adhesión al GIIC. En efecto, hoy en día esta orientación, así como la definida por la alternativa histórica, determina todas nuestras actividades y nuestra intervención en los campos proletario y revolucionario. Esta visión fundamenta nuestra posición según la cual la TCI es en el período actual la única organización en capacidad y... en deber de polarizar todas las fuerzas, viejas y nuevas, que se ubican decididamente en la lucha por el partido, las fuerzas que llamamos las fuerzas partidistas. Sin embargo, en sí misma, esta posición no puede ser considerada como un criterio de pertenencia : nada en la política actual de la TCI garantiza, ni siquiera por desgracia indica, que un día asumirá esta función como debe y que la situación histórica no terminará por cambiar el juego, redistribuyendo las cartas, dentro del campo proletario.

El compromiso militante y la organización política

Por último, hay otro "criterio" para unirse a nuestro grupo (como para cualquier grupo comunista) : el de la concepción de la organización política, de su funcionamiento y de la relación entre el militante y el organismo colectivo internacional organizado y centralizado. Este punto está relacionado con la cuestión de la voluntad militante. Pero también es una cuestión de principio fundamental y, lo que es más, una de las más difíciles de debatir y aclarar. Es en gran parte en la práctica militante diaria que el militante y... la organización aclaran y verifican el valor y la justeza de la concepción y de la práctica militante colectiva y centralizada – insistimos. Por eso intentamos publicar al menos extractos de nuestros informes de actividades para nuestras reuniones generales. Te remitimos al Informe de actividades [7] (RG #12) que nuestra 2ª Reunión general aprobó el pasado mes de junio, y llamamos tu especial atención, más allá de los pocos elementos de nuestra vida y funcionamiento cotidianos que allí se mencionan y que podrían aclararte sobre la realidad de nuestras actividades y funcionamiento, sobre lo que presentamos, y reivindicamos, como el método de partido por desarrollar y poner en práctica incluso en los pequeños círculos de hoy en día. También puedes consultar el informe de nuestra primera reunión general (RG #6) en 2016.

Así pues, estos son los tres "criterios" – acuerdo formal con la plataforma, acuerdo general con las orientaciones, voluntad de compromiso militante en un organismo colectivo internacional centralizado – sobre los que creemos que pueda realizarse una verdadera integración política en cualquier grupo comunista y, por supuesto, dentro del propio GIIC tal como existe hoy en día. Insistimos sobre una verdadera integración o adhesión. Porque, por una parte, no se trata de integrar a nuevos camaradas – de "ganar a militantes" para ser numerosos – sin que estén realmente convencidos de las posiciones de principio, de las orientaciones generales y del funcionamiento del grupo y sean realmente capaces de defenderlas ante la clase y las demás fuerzas políticas en nombre del grupo, o del partido ; y por otra parte que sean capaces de integrarse igual de realidad y eficacia en la actividad colectiva consciente, internacional, organizada y centralizada del grupo comunista. Así, en nuestra opinión, el compromiso y la adhesión de los militantes no es, por lo tanto, una mera declaración de acuerdo y adhesión. Se trata de un verdadero proceso político, no puede ser de otra manera, entre la organización y el militante en el que las discusiones y las clarificaciones políticas de cuestiones de principio y tácticas van acompañadas de una práctica militante común cada vez mayor en la que se invita y alienta a participar al nuevo militante, aunque formalmente no sea todavía miembro del grupo. Y en el que el grupo y el militante pueden comprobar la concordancia entre el acuerdo programático y político y su entendimiento militante real en la práctica. Esto vale para el nuevo militante, por supuesto. Pero también vale para el grupo en su conjunto, que en esta ocasión también comprueba por sí mismo la coherencia entre sus principios y su práctica actual.

(...).

Por lo tanto, en términos concretos, te proponemos el iniciar un debate sistemático de los puntos de nuestra plataforma, o posiciones de principio, en relación con las dos plataformas de la TCI y la CCI. Por supuesto, también estamos abiertos a cualquier otra pregunta tuya – especialmente sobre la situación actual. Tratamos de privilegiar la correspondencia escrita, lo que ’obliga’ a un mínimo de método y seriedad en la presentación de posiciones y argumentos; y esto tanto para el militante como para el grupo en su conjunto. El proceso de discusión que te proponemos no es una discusión entre un profesor y un alumno, sino un proceso dinámico en el que los "dos partidos", aunque desiguales – el cuerpo político colectivo, organizado y centralizado, históricamente vinculado a la Izquierda Comunista, no tiene el mismo ’peso’ histórico y político, ni la misma responsabilidad, que el militante individual – se enriquecen mutuamente y aprenden unos de otros.

(...).

No vaciles en hacernos saber si tienes algún desacuerdo o pregunta sobre el contenido de esta carta y las orientaciones que te proponemos.

Saludos fraternales, le GIIC, el 15 de agosto 2019.
Parte integrante de nuestras posiciones de base : la filiación histórica

El GIIC se reivindica de los aportes sucesivos de la Liga de los Comunistas de Marx y Engels (1847-52), de las tres internacionales (la Asociación Internacional de los Trabajadores, 1864-72; la Internacional Socialista, 1889-1914; la Internacional Comunista, 1919-28), de las fracciones de izquierda que se fueron separando en los años 1920-30 de la Tercera Internacional (la Internacional Comunista) en su proceso de degeneración, y más particularmente de las Izquierdas alemana, holandesa e italiana, y de los grupos de la Izquierda Comunista que se desarrollaron en particular en los años 1970 y 1980 y que provienen de esas fracciones.

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Notas:

[1. Este texto se publicó en Rassegna Comunista del 15 de abril 1921. Se consigue en español en el sitio web del PCI (www.pcint.org).

[4. Este texto no ha sido traducido al español. Nada más se puede leer su introducción : http://igcl.org/Retorno-critico-sobre-una. Se consigue el texto en inglés y francés en nuestro sitio web : http://igcl.org/Critical-Review-of-a-Contribution y http://igcl.org/Retour-critique-sur-une.

[5. Si bien no podemos abordar esta cuestión aquí, dejemos claro que está lejos de limitarse a la reivindicación formal del partido.

[6. Esto no significa excluir o ignorar por ’principio’ a las demás fuerzas revolucionarias que puedan existir y que no pretenden ser de la Izquierda Comunista.